10 Nov 2015 08:23 PM

CIEGA Y SORDA

CIEGA Y SORDA

Cierto día, una señora caminaba con sus hijas por la calle, cuando de repente una anciana parada en la orilla de la acera les extendió la mano, y dijo algo que las mujeres no escucharon, porque andaban en sus cosas, problemas y preocupaciones.

La señora puso su mano en el bolsillo y le dio unas monedas, y siguieron caminando para tomar el bus.
Al dar la vuelta a la avenida para ir a casa, las apresuradas mujeres se dieron cuenta que la viejita extendía la mano a otra persona, y ésta la ayudaba a cruzar la calle.
Era eso lo que ella les quería decir, ¡QUE LA AYUDARAN A CRUZAR! y, ciegas y sordas, la madre y sus hijas no le pusieron atención.

¿Saben?, muchas veces andamos por la vida con esa actitud de no ver y no escuchar, solamente actuamos automáticamente a los hechos que nos parece entender. Pero qué lejos estamos de la realidad; muchas veces hay personas que sólo necesitan un apoyo, una ayuda, sin considerar las cosas materiales, y que en ese momento no era necesario.

Seamos más sensibles y demostremos eso a los demás.

Le pido a Dios,  poder ser un buen ejemplo para mis hijos, ya que lo que sean ellos y los sentimientos que despierten, serán los sentimientos y enseñanzas que yo les he reflejado con mi ejemplo.

¡No caminemos por la vida ciegos y sordos, así como en alguna ocasión lo hicieron las mujeres de la historia y como tal vez, muchas veces lo hemos hecho todos!

Mil bendiciones