1 Dic 2017 08:39 PM

EL ÁGUILA QUE SE CREÍA GALLINA 

EL ÁGUILA QUE SE CREÍA GALLINA 

 

Un campesino caminaba por una montaña y de pronto, se encontró un nido de águilas reales, al lado del cual se encontraba la mamá águila real muerta. Se asomó a su nido, encontrando un huevo en su interior. El agricultor pensó: Si dejo el nido solo, no nacerá el águila, así que me lo llevaré para mi finca para ver si logro salvarlo entre las gallinas.

El labrador se llevó el huevo cuidadosamente y al llegar lo colocó en un nido donde una gallina empollaba unos huevos de gallina.
Poco tiempo después observó, con agrado, que todos los huevos dieron lugar a unos pequeños pollitos, incluyendo el pequeño águila. El águila se fue criando con los pollitos y repetía, exactamente igual, las conductas de los pollitos. No había diferencias en la conducta del águila, aunque su tamaño resaltaba sobre el resto.

El águila se creía gallina, caminaba como gallina, pensaba como gallina y actuaba como gallina, aunque tenía los atributos físicos de una poderosa águila real. Finalmente el águila murió como una gallina, sin que su conducta se diferenciara, en modo alguno de las gallinas.

Existen millones de individuos que andan por la vida, actuando como gallinas, cuando en realidad  tienen el potencial para ser Águilas Reales.

Los seres humanos estamos dotados de un cerebro espectacular, equipados con todos los elementos físicos, mentales y orgánicos para ser grandes personas, líderes exitosos, prósperos comerciantes, reconocidos profesionales, pero se conforman con actuar como gallinas y se pasan la vida buscando gusanitos y comiendo pequeños insectos. Un verdadero desperdicio. 

Muchos seres desaprovechan sus oportunidades y no logran desarrollar sus inmensos talentos para terminar con papeles mediocres y sin trascendencia en la vida.

Usted será el resultado de lo que crea que es capaz de hacer. No hay sorpresas. Si se cree gallina, será una gallina.

Nuestra águila interna espera por nosotros. Soltémosla. Volemos alto.