24 Sep 2018 06:16 PM

EL EMPUJONCITO DE DIOS

EL EMPUJONCITO DE DIOS

 

Bill, nuestro amigo, había sido operado de cáncer y estaba a punto de comenzar la terapia de radiación. Pero fue necesario que fuese otras dos veces a la sala de emergencia y someterse a otras cirugías.

Julie, su esposa, a través del correo electrónico nos pidió oración y enviaba noticias sobre Bill, y hacía largos viajes todos los días hasta el hospital. Finalmente quedó exhausta.

Tras leer su último correo, le pregunté a Dios, «¿Cómo puedo ayudarla?». Entonces se me ocurrió la idea de preguntarle a Julie si deseaba quedarse con nosotros. Pero ella se está quedando en casa de unos amigos, pensé de inmediato.

Lo comenté con mi esposo y él sintió que también debíamos ofrecerle nuestro hogar. Cuando hablé con Julie, rompió en llanto. «Mis amigos acaban de informarme que se van de vacaciones» dijo, «de modo que sentí que debía dejar la casa».

Yo había escuchado historias sobre necesidades cubiertas en el momento justo y siempre me preguntaba, ¿cómo es que ocurre esto? En este caso, ese pensamiento de invitar a Julie a quedarse en nuestra casa fue tan poderoso que pareció que Dios me lo había manifestado en voz alta.

Dios trabaja de muchas maneras cuando la gente está dispuesta a actuar según la divina dirección del Señor. Cuando Dios nos da un empujoncito para ayudar a alguien, podemos aprovechar toda oportunidad para servir a quienes nos rodean.

Proverbios 3:27 nos recuerda “No niegues un favor a quien te lo pida si en tu mano está el otorgarlo.

Por Pamela Rosales (Tomado del Aposento Alto)