26 Nov 2015 08:14 PM

EL HIJO QUE SE VOLVIÓ EL PADRE DE SU PADRE

EL HIJO QUE SE VOLVIÓ EL PADRE DE SU PADRE

 José acompañó a su padre hasta sus últimos minutos.En el hospital ayudaba a las enfermeras a cambiarlo, asearlo y hasta cambiarle las sabanas de la cama.En uno de esos días José colocó la cara de su padre contra su pecho.Lo acomodó en sus hombros consumido por el cáncer: pequeño, arrugado, frágil, tembloroso.Lo hizo como su padre lo hacía con él cuando era un niño.Lo calmó y le decía a su viejo “papá, tranquilo, estoy aquí”.Lo que un padre quiere oír al final de su vida es que su hijo está ahí.Tal vez la vejez del padre y de la madre es curiosamente el último  embarazo, nuestra última enseñanza. Un hijo se convierte en el padre de su padre, cuando el padre se hace mayor y comienza a trotar lento, impreciso,  cuando uno de los padres que te tomó con fuerza de la mano no quiere estar solo.Como hijos, somos responsables de esas vidas que nos levantaron y es una oportunidad para devolver los cuidados y el amor que nos han dado por décadas.Feliz el hijo que es el padre de su padre antes de su muerte,  y pobre  del hijo que aparece sólo en el funeral y no se despide un poco cada día de él. Afirma éxodo 20:12 “Honra a tu padre y a tu madre, para que disfrutes de una larga vida en la tierra que te da el Señor tu Dios  “