EL PROPÓSITO DE UN PERRO

EL PROPÓSITO DE UN PERRO

Un médico veterinario fue llamado para examinar a un perro de 10 años de edad llamado Belker.

Lo atendió y vio que se estaba muriendo.

Al dar la triste noticia a la familia, Carlitos, el niño dueño del animal, con tristeza aceptó la situación pero lo que dijo, cambió la forma de ver la vida a todos los presentes.

El pequeño manifestó ''La gente viene al mundo para aprender cómo llevar una buena vida, cómo amar a los demás todo el tiempo y cómo ser buenas personas. Los perros saben hacer todo eso, por eso no tienen que quedarse tanto tiempo como nosotros, porque viven sencillamente y aman generosamente”

Un perro nos enseña a saludar a seres queridos con emoción, a salir a pasear, disfrutar del aire fresco y del viento en la cara, dormir la siesta, estirarnos ante de levantarnos, correr, saltar, jugar, dejarse acariciar, tomar mucha agua cuando hace calor, recostarnos en un árbol, mover el cuerpo, disfrutar de una caminata, no pretender ser algo que no somos, escarbar lo enterrado hasta hallarlo, guardar silencio en un mal día y sobre todo a hacerle sentir a todos que estamos ahí, al lado.

Como dicen algunas abuelas “El perro tiene más amigos que la gente porque mueve más la cola que la lengua”