LA CANASTA DE BASURA
LA CANASTA DE BASURA
Una vez un hombre rico le entregó una canasta con basura a un hombre pobre,
el hombre pobre sonrió y corrió con la canasta, la vació, la lavó, la llenó de flores y se la dio de regreso.
El hombre rico se asombró y le preguntó:
¿por qué me ha dado flores, si yo le di basura?
El hombre pobre dijo:
Porque cada uno da lo que tiene en el corazón.
Hoy es una muy buena oportunidad para hacer cambios en la vida, especialmente en nuestro interior. Que sea nuestro ejemplo y lo que hablamos, lo que nos caracterice ante los demás.
Dice Dios en su palabra “De la abundancia del corazón, habla la boca” (Lucas 6:45)
“Cada uno dé como propuso en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre”. (2 Corintios 9:7)
Bendiciones para todos.