22 Mayo 2015 05:20 AM

NAUFRAGIO

NAUFRAGIO

El único sobreviviente de un naufragio llegó a la playa de una diminuta y deshabitada isla. Pidió fervientemente a Dios ser rescatado, y cada día miraba el horizonte buscando ayuda, pero no llegaba.

Cansado, finalmente optó por construirse una cabaña de madera para protegerse y almacenar sus pocas pertenencias. Un día, tras buscar alimento por la isla, regresó sólo para encontrar su cabañita envuelta en llamas, con el humo subiendo hasta el cielo. Lo había perdido todo. Quedó triste y a la vez furioso: «Dios mío, ¿Cómo pudiste hacerme esto?»

Sin embargo, al día siguiente fue despertado por el ruido de un barco que se acercaba a la isla. Habían venido a rescatarlo.

— ¿Cómo supieron que estaba aquí? – preguntó a sus salvadores.
— Vimos su señal de humo – contestaron ellos.

Amigo: La próxima vez que tu cabaña se vuelva humo, recuerda que puede ser la señal de que la ayuda y gracia de Dios viene en camino.

Dice la palabra de Dios en Isaías 41 : 10 "No tengas miedo, pues yo estoy contigo; no temas, pues yo soy tu Dios. Yo te doy fuerzas, yo te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa".