¿QUIERES QUEDAR SANO?
¿QUIERES QUEDAR SANO?
Hace algunos años, la caída de unas líneas de energía eléctrica inició un incendio que devastó más de 2,000 metros cuadrados de una bellísima sabana arbolada de los Estados Unidos. El fuego transformó la sabana en un paisaje lunar. Un sector del área quedó reducido a cenizas grises y negras, con muchos troncos de árboles quemados que salían del suelo.
Recientemente Roland regresó y todavía podia ver las consecuencias del incendio, pero al mirar con atención también pudo ver evidencias de recuperación. En la base de casi todos los árboles quemados podía observarse los brotes verdes de un nuevo arbolito. La sabana está en un lento proceso de sanación. La evidencia de los brotes tiernos en los árboles alentó el optimismo de Roland y renovó su esperanza.
Nuestras vidas pueden asemejarse a un terreno quemado, especialmente si fueron devastadas por alguna situación inesperada. Sin embargo, con el tiempo, si miramos con atención, descubriremos que la sanidad es posible. Las tragedias y los desastres podrán abrumarnos, pero como pueblo esperanzado podemos recurrir al Señor en búsqueda de una nueva vida. Cuando la incertidumbre se apodera de nuestras vidas y necesitamos ser renovados, Jesús nos pregunta: «¿Quieres quedar sano?». ¿Estamos dispuestos y dispuestas a responderle: «¡Sí!»?
La Palabra de Dios en Juan 5:6 nos recuerda que Jesús le preguntó al hombre que por 38 años había estado muy enfermo: «¿Quieres quedar sano?».
Inspirado en Roland Rink (Tomado del Aposento Alto)