UN BUEN USO DEL TIEMPO

UN BUEN USO DEL TIEMPO

Por Wendy Orellana (Tomado del Aposento Alto)

Una noche, después de pasar un período alejada de Dios, recibí la noticia de que un amigo de la niñez había muerto en un trágico accidente de tránsito. Sentí tanto dolor que fue como si muriera por dentro, pero a la vez esto me llevó a reflexionar sobre mi vida y me volví a Dios. Lo más doloroso fue preguntarme, ¿por qué fue necesaria una situación tan trágica para reflexionar y buscar a Dios nuevamente? Igual que muchos otros misterios en esta vida, todavía no he hallado respuesta. La única certeza que tengo es que no quiero volver a separarme de quien me dio vida, mi Padre amoroso.

Es posible que muchos de nosotros nos dediquemos de lleno a la ambición por alcanzar una mejor posición económica, social y mayor reconocimiento, pero a veces olvidamos que fue el Señor quien nos dio esta vida que tanto apreciamos. Cuando me descubro esforzándome por tener éxito, debo preguntarme: ¿estoy usando bien mí tiempo? ¿Estoy viviendo como si este fuera mi último día? Estas y otras preguntas ayudaron a cambiar mi forma de pensar. Dios, quien es todo misericordia, nos da la oportunidad, una y otra vez de arrepentirnos de nuestros errores y faltas. Al hacerlo, sentimos que volvemos a nacer.

Dice Efesios 5:15-16 “Por tanto, ¡cuidado con su manera de vivir! No vivan ya como necios, sino como sabios. Aprovechen bien el tiempo, porque los días son malos”.