Familia del joven que descuartizó el caballo en corralejas se defiende
En medio de la polémica y el rechazo por el maltrato animal en las corralejas de Buenavista, Sucre, evidenciado en un vídeo en redes sociales, aparece la pobreza y el hambre.
Katherine Wilches, esposa de Rafael Narváez, el hombre que junto a otros aparece descuartizando el caballo, pide que cese la polémica y no se juzgue a su compañero.
El joven de 28 años y desempleado, solo estudió bachillerato y tiene 4 hijos con edades entre los 4 y 10 años. Viven en un barrio subnormal en una pequeña casa de bahareque.
La mujer asegura que el caballo no estaba vivo cuando le cortaron un pernil y que esto es frecuente en las corralejas, porque personas como su esposo utilizan esa carne para llevar al hogar.
Y es que 17 días después de los hechos, aún en la cocina de la humilde vivienda hay carne salada de caballo, que será servida a la familia.
Katherine aseguró que son muchas las personas que van de corraleja en corraleja tras la oportunidad de carne de caballo e incluso que los que más la solicitan son los vendedores de chuzos en esas fiestas.
Ella independientemente de la polémica asegura que su esposo no hizo nada malo. Por eso pide que no sea señalado como una mala persona.
La mujer teme por lo que pueda pasar con ella y sus hijos porque el alcalde de Buenavista instauró una denuncia penal contra este hombre por daño en bien ajeno, que lo podría llevar a la cárcel.
* Con información de RCN La Radio