
Sobre las 7:00 p.m. de este miércoles varios internos de la Unidad de Reacción Inmediata de Puente Aranda, en el occidente de Bogotá, protagonizaron un intento de fuga, situación que dejó tres lesionados y varios daños en oficinas.
“Tuvimos esta novedad en donde algunos internos aprovecharon que los estaban trasladando para empujar al custodio y posteriormente salieron corriendo, en inmediaciones del lugar varios uniformados, algunos de tránsito evitaron que estas personas se fugaran y los recapturaron”, explicó el general Eliécer Camcaho, comandante de la Policía de Bogotá.
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En medio de la tensa situación, tres internos resultaron lesionados por cortes de vidrios de ventanales que ellos mismos dañaron, y un funcionario de la Fiscalía resultó afectado por los gases que usó el Esmad para controlar a los detenidos.
Familiares de los internos revelaron algunos audios dónde los detenidos manifestaron su rechazo a la situación que viven al interior de este lugar de detención.
“Estamos cansados, desde hace seis meses no hacen traslados para atención en salud, nos han quitado las visitas y el hacinamiento y condiciones sanitarias son pésimas, estamos mamados”, denuncia uno de los internos.
Sobre estos hechos, el general Camacho aseguró que es necesario que las autoridades competentes como el Ministerio de Justicia y el INPEC tomen las medidas correspondientes para solucionar esa crisis y evitar futuras situaciones que alteren el orden público.
De otro lado, el alto oficial respondió a otra denuncia de los familiares de los presos, quienes argumentaron que hay quejas sobre un integrante de la Sijín, que es custodio y presuntamente maltrata a los retenidos.
“Yo delegué a un oficial para identificar este funcionario y verificar lo que está pasando para tomar las medidas correspondientes”, indicó.
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Sobre las 11:00 p.m., las autoridades terminaron el reconteo en las celdas y confirmaron que no hubo fuga y también descartaron que hubieran personas muertas o heridas de gravedad.