TransMilenio, el sistema masivo de transporte de Bogotá, en este medio se moviliza gran parte de los ciudadanos diariamente, tanto así que Bogotá trabaja por fortalecer su transporte público con obras como el Metro y la implementación de diferentes rutas del SITP para garantizar una movilidad efectiva para la capital.

A pesar de ser una empresa 100% pública, una encuesta reciente del Partido MIRA reveló un sorprendente dato: el 47% de los bogotanos cree que TransMilenio es una entidad privada. Este resultado refleja un importante reto en términos de comunicación y pedagogía que las autoridades deben abordar para fortalecer el sentido de pertenencia hacia este sistema, que es un patrimonio de todos los bogotanos.

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¿Cómo es el sistema de TransMilenio?

TransMilenio cuenta con una infraestructura imponente que incluye 10.971 buses, de los cuales tres de cada diez son vehículos de cero emisiones, lo que coloca a Bogotá entre las ciudades con una de las flotas más grandes de buses ecológicos en Latinoamérica.

Este sistema también dispone de 7.673 estaciones y paraderos, y 552 rutas que cubren gran parte de la ciudad. Además, el sistema es una fuente significativa de empleo, proporcionando trabajo a 24.446 conductores, lo que refuerza su papel crucial en la economía local.

Los colados: el eterno dolor de cabeza para TransMilenio

Uno de los temas más preocupantes que se abordaron en el debate del Concejo de Bogotá fue la creciente cultura de colados en el sistema TransMilenio. Según datos de la misma empresa, diariamente 612 mil personas evaden el pago del pasaje, lo que se traduce en pérdidas de aproximadamente 1.800 millones de pesos al día.

Este fenómeno no solo tiene un impacto negativo en las finanzas del sistema, sino que también refleja una crisis de sentido de pertenencia y responsabilidad ciudadana. La evasión del pago no es solo un delito menor; representa un desafío para la sostenibilidad económica del transporte público y pone en riesgo la calidad del servicio que se ofrece a todos los usuarios.

La encuesta, que incluyó la opinión de 5.946 personas, reveló preocupantes percepciones ciudadanas sobre TransMilenio.

Además de la confusión sobre su naturaleza pública, la encuesta mostró que cuatro de cada diez usuarios de la red troncal y tres de cada diez de TransMiCable consideran que la relación entre tarifa y servicio es "mala" o "muy mala".

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Esta percepción negativa pone de manifiesto la necesidad de mejorar la calidad del servicio, optimizar rutas, y garantizar que las tarifas se correspondan con la calidad y eficiencia del transporte ofrecido.

Superar la polarización y fortalecer el transporte público

El concejal Samir Bedoya Piraquive hizo un llamado a superar la polarización política que ha afectado históricamente el desarrollo del transporte público en Bogotá. Señaló que, desde 1884, todos los sistemas de transporte en la ciudad han contado con participación privada, lo cual ha sido esencial para el progreso urbano. Sin embargo, la falta de acuerdos y la politización del tema han impedido que Bogotá cuente con un sistema de transporte de calidad.

Bedoya subrayó la necesidad de que los representantes de la ciudad trabajen juntos para fortalecer el transporte público, no solo como un servicio esencial, sino también como un motor de desarrollo económico y social.

La bancada del Partido MIRA hizo un llamado a la ciudadanía para fortalecer su sentido de pertenencia hacia TransMilenio, recordando que este es un bien público y patrimonio de todos los bogotanos.

La apropiación ciudadana es fundamental para garantizar que TransMilenio no solo sobreviva, sino que prospere en los años venideros, ofreciendo un servicio que esté a la altura de las expectativas de todos los bogotanos.