Inicia el proyecto ‘Bogotá a cielo abierto’ con vendedores informales en Puente Aranda

El plan piloto se va a hacer en espacios del Instituto Para la Economía Social de la ciudad (Ipes), que según autoridades cuentan con las condiciones de ventilación y bioseguridad para desarrollar esas actividades y beneficiar a sectores afectados por cuenta de las cuarentenas. 

“Es una estrategia que lleva ‘Bogotá a cielo abierto’ a los informales para que la ciudad siga siendo productiva y pese a la pandemia podamos seguir cuidándonos y evitar las aglomeraciones en vía”, dijo la secretaria de Desarrollo Económico, Carolina Durán. 

“¿Cuáles son las bodegas que pensamos que podemos utilizar en esa estrategia? En este momento son diez las que queremos llegar a aprovechar. Es un piloto que, como todo lo que hemos hecho este año, si funciona nos va a permitir amparar a la gran población de ventas informales en calle”, añadió. 

Asimismo, Durán aseguró que esperan extender el proyecto a otras localidades y beneficiar a la totalidad de vendedores de la ciudad articulándose con otras instituciones como la Secretaría de Gobierno, que también junto al Ipes ha implementado estrategias en pro de ese sector. 

La semana pasada se anunció, por parte del Distrito, la peatonalización y disposición de algunas vías de la ciudad en donde más se presentan aglomeraciones por cuenta de las ventas informales para que los comerciantes continúen con sus actividades económicas y las personas puedan comprar sin riesgo de contagio. 

En zonas como en San Victorino se articulan las acciones con el comercio formal para que desde ambos sectores se implementen medidas de bioseguridad y se promueva la pedagogía del autocuidado ya que autoridades distritales afirman que en el 2021 no habrá vacunación masiva de covid-19.