Revelan los errores que están dañando su cafetera sin que se dé cuenta
Colombia ocupa el tercer lugar mundial en producción de café, y sus habitantes beben entre 3 y 4 tazas diarias.
El café es, sin duda, una de las bebidas más queridas por los colombianos. Su aroma y sabor forman parte de la rutina diaria de millones de personas, especialmente en ciudades como Bogotá, donde el clima frío invita a disfrutar varias tazas al día.
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Para nadie es un secreto que el café es parte esencial de la identidad colombiana. Según la Federación Nacional de Cafeteros, los colombianos consumen en promedio entre tres y cuatro tazas de café al día, impulsando la preferencia por cafés de origen, premium y de alta calidad.
Sin embargo, el café ha dejado de ser solo una bebida cotidiana para convertirse en una experiencia que combina sabor, bienestar y tecnología.
En oficinas, hogares y pequeños locales, preparar una buena taza se ha transformado en un ritual que une, reconforta y despierta los sentidos.
Detrás de ese momento tan especial hay un protagonista silencioso que requiere atención constante y es la cafetera. Este electrodoméstico, tan común en los hogares colombianos, suele recibir menos cuidado del que realmente necesita. Muchas personas desconocen que ciertos hábitos cotidianos podrían estar reduciendo su vida útil sin que se den cuenta.
Revelan los errores que están dañando su cafetera sin que se dé cuenta
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¿Por qué tener una cafetera en casa?
En tiempos donde la eficiencia, la rapidez y la productividad son prioridad, cada minuto cuenta. Por ello, cada vez más familias han decidido invertir en una cafetera moderna que les permita disfrutar del café a su gusto sin complicaciones.
Según la experta Cecilia de Narváez, Head of Marketing de Newell Colombia, este electrodoméstico "ha dejado de ser un lujo para convertirse en una herramienta práctica que se adapta a los distintos estilos de vida y gustos de los consumidores".
Pero, el uso inadecuado o la falta de mantenimiento puede traer consecuencias. Cecilia advierte que muchos equipos se deterioran prematuramente por errores que parecen inofensivos, pero que afectan directamente su funcionamiento. Entre ellos, menciona no limpiar el molino, usar café húmedo, forzar el portafiltro o ignorar las alertas del panel.
"Cada parte de la cafetera cumple una función esencial. Si se deja acumular residuos o se usa el tipo de café equivocado, el sistema empieza a trabajar con dificultad, y eso reduce su desempeño y durabilidad", puntualizó la experta.
Errores más comunes que están dañando las cafeteras sin que se note
Aunque parezca sorprendente, muchas personas terminan dañando su cafetera por descuido o desconocimiento.
Entre los fallos más frecuentes está dejar leche en el depósito durante horas, usar café molido inadecuado o no limpiar el sistema de leche después de cada uso. Estos puntos, aunque parezcan pequeños, pueden provocar obstrucciones, mal olor y daños en los conductos internos.
Cecilia también hace énfasis en la frecuencia de limpieza. Según sus recomendaciones, se deben hacer distintos tipos de mantenimiento:
- Diario o después de cada uso: limpiar la bandeja de goteo, el portafiltro, la jarra y el depósito de leche.
- Semanal: lavar el molino y el sistema de vaporización.
- Cada tres a seis meses: hacer una limpieza profunda del depósito de agua y revisar el sistema de vapor.
Además, es fundamental evitar dejar restos de café o agua por largos periodos, ya que esto fomenta la aparición de bacterias y genera mal olor. Un truco útil, según la especialista, es usar agua filtrada, pues previene la acumulación de cal en los conductos internos.
Revelan los errores que están dañando su cafetera sin que se dé cuenta
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Consejos prácticos para cuidar y prolongar la vida de la cafetera
Más allá de la limpieza, el cuidado de una cafetera también depende de elegir el modelo adecuado y conocer sus funciones. La experta recomienda evaluar el estilo de café que cada persona disfruta antes de comprar una máquina.
"Si se prefiere el café molido fresco y se disfruta controlar la molienda, existen modelos que permiten ajustar la intensidad y textura. En cambio, si el gusto está en bebidas con leche como cappuccinos o lattes, conviene una máquina con vaporizador o depósito especial para leche", explicó.
Otro punto clave es la facilidad de desmontar y lavar los componentes. Bandejas, filtros y portafiltros deben ser de fácil acceso para garantizar una limpieza completa.
Finalmente, ella insiste en un consejo que muchos pasan por alto y es leer el manual antes del primer uso. Allí se indican las recomendaciones específicas de mantenimiento para cada modelo, lo que puede evitar daños costosos a futuro.
Fuente
Alerta Bogotá.
