
A menos de 50 kilómetros de Bogotá, el municipio de El Rosal (Cundinamarca) se ha convertido en un punto de interés para quienes buscan una opción distinta, económica y cercana para descansar del ritmo urbano. Una de sus principales atracciones son las aguas termales naturales ubicadas en la vereda La Hondura de Chingafrío, a las que se accede de forma gratuita.
Según información suministrada por la Alcaldía de El Rosal y la comunidad local, este espacio natural no cuenta con infraestructura turística formal ni cobros por ingreso, lo que permite el acceso libre a visitantes. Sin embargo, los residentes hacen un llamado a los turistas para mantener limpio el entorno y no dejar residuos durante la estadía.
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El trayecto hasta las termales comienza saliendo desde Bogotá por la calle 80, en un recorrido de aproximadamente 45 minutos en vehículo particular hasta el parque principal del municipio. Desde allí, se puede continuar en taxi o vehículo particular hacia la vía que conduce a Subachoque. Son cerca de 8 kilómetros por carretera sin pavimentar hasta la zona donde inicia el acceso peatonal hacia el manantial.
Termales gratis cerca de Bogotá
Este tipo de turismo, de bajo costo y centrado en el entorno natural, ha cobrado relevancia en los últimos años, según reportes del Instituto Departamental de Cultura y Turismo de Cundinamarca. La ausencia de tarifas en el acceso a las termales las convierte en un punto de interés recurrente, especialmente los fines de semana y días festivos.
A pesar de que no hay instalaciones formales como baños o zonas de parqueo definidas, el sitio permanece abierto al público de manera constante. Las autoridades recomiendan a los visitantes ir preparados con elementos de seguridad, hidratación y, de ser posible, evitar el uso de plásticos de un solo uso.
Turismo rural y economía en El Rosal
El Rosal es reconocido oficialmente como el municipio más joven de Cundinamarca, tras su separación administrativa de Subachoque en diciembre de 1997. De acuerdo con datos de la Gobernación de Cundinamarca, el crecimiento poblacional y la consolidación de actividades económicas impulsaron su independencia.
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La economía local gira principalmente en torno a la floricultura y la ganadería, sectores que generan empleo formal e informal. Empresas dedicadas al cultivo de flores para exportación han instalado operaciones en la zona, mientras que pequeños productores y cooperativas ganaderas abastecen el mercado regional.
El municipio también promueve el turismo rural como una estrategia complementaria. Desde la administración local se han desarrollado actividades de sensibilización y señalización en algunas rutas ecológicas para orientar a los visitantes e incentivar prácticas de turismo responsable.
Actividades al aire libre en Cundinamarca
El entorno natural de El Rosal ofrece múltiples alternativas para actividades al aire libre. La Secretaría de Turismo de Cundinamarca ha destacado el potencial de este municipio como destino de ecoturismo. Entre las rutas disponibles, se encuentran senderos hacia cascadas ocultas, caminos rodeados de vegetación nativa y miradores con vista al valle central del departamento.
Los aficionados al ciclomontañismo cuentan con vías secundarias y rutas de media y alta exigencia que atraviesan zonas rurales, mientras que formaciones rocosas naturales permiten la práctica de escalada en roca, una disciplina que ha ganado practicantes en la región.
En cuanto a manifestaciones culturales, El Rosal mantiene una agenda de ferias agrícolas y eventos tradicionales, entre ellos celebraciones dedicadas a los productos emblemáticos como la leche y la panela. La visita a pequeñas fábricas de producción artesanal, según la Oficina de Desarrollo Económico Municipal, permite conocer los métodos de elaboración y el impacto de estas actividades en la economía local.
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El turismo en El Rosal continúa desarrollándose de manera orgánica, sin intervención masiva, por lo que el respeto por el entorno y las costumbres locales es un componente clave para mantener la sostenibilidad del destino.