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El padrastro del recluso dice que a su muchacho le 'achacaron' un crimen que no cometió y en prisión halló la muerte.
La familia de un recluso quien falleció dentro de la Cárcel Nacional Modelo en Bogotá, denuncia que al interno lo envenenaron y esta es la hora que el centro penitenciario no dice ‘ni mú’ sobre el tema.
Humberto Obeso Calvo, padrastro de la víctima identificada como Byron Ríos de 26 años de edad, dijo en la emisora La Cariñosa de RCN Radio que los guardianes del Instituto Nacional Penitenciario (Inpec), lo llamaron para informarle que el muchacho se había muerto y ya.
El pariente del hoy fallecido relató en el noticiero Alerta Bogotá, que algunos presos en La Modelo les contaron que a Byron lo habrían envenenado por medio de una sobredosis, y hasta presentaría fuertes golpes en la cara, especialmente en el pómulo.
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El señor Obeso indicó que los despojos mortales del ser querido, quien convivía en unión libre, pero sin hijos, fueron entregados con el ataúd herméticamente sellado en avanzado estado de descomposición, y por eso tuvieron que enterrarlo rápidamente sin que nadie pudiera verlo.
Ríos había sido sentenciado por un juez de la república hace 7 meses por supuestamente participar en un homicidio registrado contra un parroquiano en la localidad de Suba, noroccidente de Bogotá, hecho en el cual al ser testigo del crimen no ‘echó al agua’ a los responsables de la muerte y por eso le ‘achacaron’ la culpa.
