Trancones en la Boyacá tienen culpable: conductores y peatones, en riesgo

La movilidad en Bogotá continúa siendo uno de los principales retos para sus habitantes. Según reportes de plataformas como Google Maps y Waze, los ciudadanos pierden en promedio hasta dos horas al día atrapados en los habituales trancones que afectan el flujo vehicular en la capital.

Una de las vías más críticas en este contexto es la avenida Boyacá, un corredor vial clave que atraviesa localidades como Suba, Engativá, Fontibón, Kennedy, Tunjuelito y Ciudad Bolívar. Esta avenida además se conecta con importantes vías arteriales de la ciudad como las avenidas Américas, Primero de Mayo y Villavicencio, lo que intensifica los niveles de congestión.

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Zona crítica sin soluciones: tramo entre Calle 13 y Primero de Mayo

En medio de esta situación, el concejal Julián Forero, conocido como ‘Fuchi’, denunció públicamente a través de sus redes sociales las múltiples fallas de movilidad en un tramo específico de la avenida Boyacá, entre la Calle 13 y la Primero de Mayo. Forero señaló que esta zona carece de señalización adecuada, pasos peatonales seguros y giros habilitados, lo que pone en riesgo a peatones y conductores.

Uno de los puntos críticos es el sector cercano al centro comercial El Edén, donde, según el concejal, existe un compromiso contractual para construir un puente peatonal que facilitaría la eliminación del semáforo actual y mejoraría el flujo vehicular. A pesar de estar plasmado en los planos del proyecto, la estructura no ha sido construida, afectando directamente a quienes transitan por esta zona.

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Autoridades distritales en la mira por falta de exigencia a privados

Forero indicó que el incumplimiento de este compromiso ha sido tolerado por la administración distrital. Criticó que la Secretaría de Movilidad no haya exigido a los promotores del proyecto el cumplimiento de lo pactado, lo cual ha generado represamientos de tráfico y cruces peligrosos para los peatones, quienes a diario arriesgan su integridad intentando cruzar esta vía de alta velocidad sin condiciones seguras.

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El concejal aseguró que tomará dos acciones concretas: en primer lugar, realizará un recorrido técnico con entidades como el IDU y Movilidad para verificar en campo la situación, y en segundo lugar, mantendrá vigilancia constante para que se hagan efectivas las responsabilidades de los actores privados y públicos involucrados.

Este caso refleja una problemática recurrente en Bogotá, donde los grandes proyectos urbanísticos no siempre cumplen con sus compromisos de infraestructura vial complementaria, afectando directamente la seguridad y la movilidad de miles de ciudadanos.