
En una entrevista en Alerta Bogotá 104.4 FM, conductores informales del sector Quintas del Sur, ubicado en la localidad de Ciudad Bolívar, denunciaron una serie de amenazas, extorsiones y asesinatos presuntamente perpetrados por grupos que se identifican como integrantes de organizaciones armadas ilegales. Los afectados señalaron que las intimidaciones han generado temor generalizado y han limitado sus jornadas laborales.
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Extorsiones a conductores informales
Los conductores explicaron que personas que se presentan como miembros de grupos paramilitares están exigiendo pagos mensuales de seis millones de pesos, argumentando que se trata de una "vacuna" obligatoria por operar en la zona. Los extorsionistas han llegado directamente a los puntos donde los vehículos se concentran, sin enviar panfletos ni intermediarios.
Según los testimonios, no es una sola persona la que realiza estas exigencias. Varios individuos han hecho presencia en distintos momentos, incrementando el temor entre los conductores. Aunque las víctimas afirman que han entregado videos de cámaras de seguridad a la Policía, aseguran que hasta el momento no se han tomado medidas efectivas.
Asesinatos y amenazas recientes
Los denunciantes reportaron el asesinato de dos conductores en hechos ocurridos recientemente. Uno de ellos recibió dos disparos en la cabeza mientras se desplazaba en su vehículo. Los agresores, que se hicieron pasar por pasajeros, le dispararon desde el interior del automóvil. En el mismo ataque, también resultó herida su acompañante.
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Otro conductor fue víctima de un atentado en el que recibió disparos en la cabeza, el hombro y el pecho. Actualmente se encuentra hospitalizado y en condición crítica. Las cámaras de vigilancia del sector captaron el ataque, y las imágenes fueron entregadas a las autoridades.
Además, hace cuatro días, uno de los conductores fue abordado en su vehículo por sujetos armados que lo amenazaron directamente. Le advirtieron que, si no se entregaban los seis millones de pesos exigidos en un plazo de ocho días, continuarían los asesinatos. Ya han pasado cuatro días desde esa amenaza, lo que ha generado una creciente preocupación entre los trabajadores del gremio.
Reclamos por inacción de las autoridades
Los transportadores aseguraron que han puesto en conocimiento de las autoridades todos los casos, incluidas pruebas audiovisuales y testimonios, pero manifestaron que la respuesta institucional ha sido insuficiente. Denuncian que la Policía solo realiza rondas esporádicas cuando hay incidentes, y que no se ha garantizado una presencia constante ni acciones de prevención.
Debido a esta situación, los conductores han reducido sus horas de trabajo, principalmente en las noches, por temor a nuevos ataques. Algunos han dejado de salir a laborar, y la zozobra se ha extendido a sus familias.
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Los trabajadores enfatizaron que no tienen intención de pagar la suma exigida, ya que consideran que acceder a la extorsión solo agravaría la situación, al abrir la puerta a nuevos cobros y a un posible escalamiento de la violencia. Mientras tanto, esperan acciones urgentes de las autoridades para prevenir más agresiones.