Chía entrará en obra: trayectos a Bogotá serán cortos

La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) informó la viabilidad ambiental para ajustar el trazado de la Troncal de los Andes en 1,3 kilómetros, con el propósito de proteger cuerpos de agua estratégicos del sector. En comunicado oficial, se indicó que la evaluación tuvo en cuenta actuaciones del Tribunal Administrativo de Cundinamarca y del Consejo de Estado, en presunto cumplimiento de decisiones previas sobre el proyecto.

El anuncio habilita el avance técnico y administrativo de una variante que busca conectar la vía concesionada departamental Devisab con la Autopista Norte, con impacto directo sobre la Avenida Pradilla en Chía y la movilidad regional. La medida se enmarca en la planificación de infraestructura para la Sabana Centro y Occidente, con énfasis en sostenibilidad y articulación intermunicipal.

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Declaraciones oficiales y alcances del proyecto

El alcalde de Chía, Leonardo Donoso, señaló en presunto: “La licencia otorgada a la Troncal de los Andes es un anhelo y una esperanza para el desarrollo económico de los habitantes del municipio y de la región”. Agregó: “Pedimos a las entidades acelerar el proceso para que la región tenga una solución a la movilidad. Seguiremos trabajando en este propósito”.

Por su parte, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, afirmó en presunto que la viabilidad ambiental permite retomar una obra proyectada para garantizar una variante que conecte la concesión Devisab con la Autopista Norte. Según indicó, el departamento está en la fase final de la estructuración de estudios y diseños de una doble calzada de 8 km, desde el costado sur de la variante de Cota hasta su integración con la Troncal de los Andes.

El mandatario departamental añadió en presunto que, a la altura de la variante de Cota, se proyecta la extensión de la Avenida Suba – Cota, cuyos diseños en el tramo cundinamarqués están a nivel de detalle, con el objetivo de interconectar Devisab con la Autopista Norte. Esta interconexión, también en doble calzada, busca constituir un circuito de integración Bogotá–Región y generar efectos en turismo, inversión y empleo.

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Implicaciones para la movilidad Bogotá–Región

Con la viabilidad ambiental y los ajustes de trazado, el proyecto de la Troncal de los Andes plantea una alternativa para descongestionar corredores como la Calle 80 y la Calle 13 mediante nuevas conexiones y mejoras de capacidad. La variante propuesta se orienta a redistribuir flujos hacia la Autopista Norte y a reforzar la red interurbana entre Chía, Cota y Bogotá, con impactos en tiempos de desplazamiento y en la operación del transporte regional.

En términos de gestión, la etapa siguiente incluye la consolidación de licencias y permisos, el cierre de estudios técnicos y la definición de esquemas de financiación. El avance depende de la coordinación entre autoridades ambientales, entidades territoriales y concesiones viales, con seguimiento a los instrumentos de planificación y a la protección de ecosistemas asociados al trazado.

Las administraciones municipal y departamental reiteraron que la ejecución se hará con acompañamiento técnico y control, en presunto cumplimiento de los requerimientos ambientales y de movilidad. El cronograma y los hitos de obra se informarán en próximas actualizaciones, con énfasis en la articulación Bogotá–Cundinamarca y la mejora de la conectividad para usuarios cotidianos y productivos.