
Con preocupación, Asobares Bogotá rechazó el Decreto 293 expedido por la Alcaldía Mayor, que establece nuevos horarios para establecimientos donde se expendan o consuman bebidas alcohólicas. Para el gremio, la norma implica un retroceso normativo, rompe el diálogo con el sector y contradice los principios del plan de desarrollo “Bogotá Camina Segura 2024-2027”.
“Se han perdido 12 años de avances en articulación y profesionalización del sector nocturno con la Administración de la Capital”, advirtió Asobares en su pronunciamiento. Según el gremio, el decreto revive medidas restrictivas como las adoptadas en 1984 con el Decreto 230 del entonces alcalde Augusto Ramírez Ocampo.
Más noticias: Cantinas y cigarrerías de barrio deberán cerrar temprano: ley los obliga
Entre las principales observaciones, la asociación señala que se impone una zonificación restrictiva que ignora la diversidad de la oferta nocturna en Bogotá, y que se desestima la experiencia de programas como Fiesta Sana y Segura (2015), Sello Seguro (2018) y Redes de Cuidado (2021).
También alertan por la falta de concertación: “Se rompe la coordinación construida entre el gobierno distrital y los empresarios del sector durante años, desconociendo espacios de concertación público-privada”, afirman.
Lea también: Banda ‘Los Patas’ cayó en Bogotá: estarían tras crimen en Bosa
El gremio cuestiona además que se estigmatice al sector al asociarlo con problemáticas de seguridad sin base técnica: “El decreto reproduce una narrativa oficial que culpa al sector formal del entretenimiento, sin evidencia clara de su causalidad”.
Frente a la creación del Índice de Seguridad y Convivencia Urbana (ISCOU), Asobares advierte que carece de criterios técnicos definidos y que su implementación genera “incertidumbre regulatoria y limitaciones a la libertad económica”.
Impacto económico y laboral
La organización gremial destaca que esta medida se suma a otras dificultades, como los efectos de la reforma laboral, que incrementa los costos para el trabajo nocturno. Esto, dice Asobares, pone en riesgo los más de 279.000 empleos vinculados a bares, restaurantes y servicios afines, de los cuales más de la mitad corresponden a mujeres y cerca del 30% a jóvenes entre los 18 y 28 años.
“El decreto impone las mismas restricciones a empresarios comprometidos con la legalidad y la convivencia que a aquellos que operan por fuera de la normatividad”, subrayó la organización.
Asobares también cuestiona la falta de coherencia entre el discurso institucional y las medidas adoptadas: “Se promueve desde el discurso una ciudad activa las 24 horas mientras se restringen los horarios nocturnos y se hacen mínimos avances en la política pública ‘Bogotá Productiva 24 Horas’, establecida en el artículo 95 del Plan de Desarrollo Distrital”.
Además, advierten que condicionar la operación hasta las 5:00 a.m. a un índice aún inexistente (ISCOU) genera un vacío normativo que afecta la planeación empresarial y la seguridad jurídica del sector.
En otras noticias: Abuela de Miguel Uribe está hospitalizada: María Carolina pide fuerza
Pese a las críticas, el gremio reiteró su disposición al diálogo: “Estamos dispuestos a aportar conocimiento técnico, datos sectoriales y propuestas estratégicas que permitan construir una política pública nocturna basada en evidencia, corresponsabilidad y visión de futuro”, señalaron.
“Creemos firmemente que esta es una oportunidad histórica para construir confianza, reconocer las buenas prácticas del sector y consolidar una gobernanza nocturna moderna y coherente con las necesidades reales de la ciudad”, concluyó Asobares.