
Misteriosa muerte de joven bogotano que apareció en un río de Barrancabermeja
La familia de un joven bogotano de 15 años que apareció sin vida en el río La Colorada, en Barrancabermeja (Santander), pide a las autoridades que se aclaren las circunstancias de su muerte, pues la versión que dieron las personas que acompañan al muchacho no coincide la forma en que encontraron el cuerpo.
Todo empezó el sábado 23 de agosto, cuando el adolescente les contó a sus padres que quería viajar a Cartagena para asistir al partido de Millonarios por la Copa BetPlay
"Mis papás se niegan, claramente, porque le dicen que eso es un viaje muy largo; aparte, ¿cómo se va a ir con personas desconocidas? Y él era menor de edad", relató Diana Moreno Cardoso, hermana del joven, en entrevista con Alerta Bogotá 104.4 FM.
Los padres se acostaron pensando que su hijo había acatado sus órdenes, pero se encontraron con una ingrata sorpresa al día siguiente: "El día domingo, ellos pensaron que estaba en la casa de algún amigo porque no lo encontraban por ningún lado".
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Ya en la tarde, se llevaron una sorpresa mayor cuando el joven los llamó a hacerle otra petición, a la que ellos se negaron, de nuevo: "Él los llamó más o menos a eso de las tres y media o cuatro y media [de la tarde], en ese rango, a pedirles dinero, a lo cual, obviamente, ellos se negaron porque no tenían plata".
Los padres le dijeron que, si "necesitaba algo, que llegara a la casa": "En ese momento, ellos no sabían él dónde se encontraba", añadió Diana.
No volvieron a saber nada de él hasta el martes 26 de agosto, cuando recibieron otra llamada, pero no de él, sino de personas extrañas. Una llamada en la que percibieron que ya había algo raro en la historia: "Mi madre recibe una llamada, más o menos a las 9 de la mañana, en la cual le dicen que ellos habían llegado a Cartagena, que mi hermano se había metido al mar y que no había vuelto a salir, que ya los rescatistas lo intentaron buscar, pero que no lo encontraron, a lo que nosotros nos asustamos, porque él no sabía nadar".
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A las 11 de la mañana, volvieron a llamarlos, pero con una versión diferente sobre su paradero y les dijeron que en realidad se había perdido en un río de Barrancabermeja.
"Yo estaba intentando comunicarme con la ciudad de Cartagena, con el 123, pero me fue imposible. Después, cuando se volvieron a comunicar nuevamente con mi mamá, le dijeron que no, que ellos habían llegado a ir hasta Barrancabermeja y que allí habían llegado al río La Colorada, que se estaban bañando y que de un momento a otro él se les perdió, que no sabían para dónde se había ido, que ellos esperaron a ver si él llegaba, pero que nunca llegó, entonces, que ellos le habían dado aviso a unos militares que iban pasando por la zona", dijo Diana.
En ese punto, lo que parecía una extrañeza se volvió una certeza: la versión que les contaron no era del todo cierta. "Agarraron las pertenencias de mi hermano y ellos se fueron. La verdad, mi hermano no conocía a todas las personas con las que se fue; solo conocía a uno que supuestamente era el amigo, el que lo convenció varias veces para que hicieran este viaje".
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El esposo de Diana consiguió el contacto de un mayor de la Policía en Barrancabermeja, que les confirmó que en efeco "habían encontrado un joven flotando en el río La Colorada".
El oficial, incluso, les dijo que el cuerpo tenía algunas heridas: "Cuando hablamos con el señor, él nos dice que ya habían hecho el levantamiento, que al joven lo habían encontrado con laceraciones realizadas con arma cortopunzante en la zona de su pecho. Nos dijeron que tenía un rango de entre 15 a 25 años y que había sido trasladado a la ciudad de Bucaramanga".
Después de ir al Instituto de Medicinal Legal y hablar con un médico que le ayudó a buscar el caso, Diana decidió viajar a Bucaramanga, donde, el jueves pasado, le entregaron el cuerpo. "Allá, nuevamente, me confirmaron que sí, que sí era él, y yo hice toda la documentación para devolverme con el cuerpo, y él estuvo llegando aquí el día sábado, más o menos a las dos de la tarde. A las siete nos hicieron entrega, y el domingo ya le realizamos el velorio y la sepultura".
Lo que la familia cree es que alguien "lo atacó con el arma cortopunzante y lo dejó, como quien dice, moribundo, para luego lanzarlo al río y dejarlo morir".