En Colombia, aproximadamente el 40,3 % de los ciudadanos vive en arriendo, según datos del DANE. Esta situación se debe en gran parte a los altos precios de la vivienda y a los elevados intereses que aplican las entidades bancarias al momento de otorgar un crédito hipotecario. Aquellos que logran adquirir una propiedad frecuentemente se enfrentan a deudas a largo plazo, que en ocasiones pueden triplicar el valor inicial del inmueble.

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Abonos inteligentes: la estrategia para reducir años de deuda

Expertos de Soluciones Hipotecarias y la especialista en crédito Mabel Quintero explicaron que mediante el uso de abonos dirigidos a capital, los deudores pueden reducir de forma significativa el tiempo total del crédito y el monto pagado por intereses. En un ejemplo concreto, una cliente que paga una cuota mensual de $853.000, de la cual solo $57.000 se destinan a capital y $700.000 a intereses, podría reducir años de deuda con una estrategia adecuada.

Al realizar un abono adicional de $660.000 directamente a capital, sin cambiar el valor de la cuota mensual, se logra reducir el plazo del crédito de forma importante. Esta modificación impacta de inmediato la proporción del capital abonado en cada cuota, y permite que la deuda se termine de pagar más rápido. En este caso, se estima un ahorro superior a $110.000.000 en intereses bancarios.

Cómo solicitar una reducción de plazo

Según los especialistas, al realizar un abono extraordinario, los bancos por defecto tienden a aplicar el dinero para reducir el valor de la cuota mensual, pero manteniendo el plazo original. Esto beneficia a la entidad financiera, ya que prolonga la generación de intereses.

Para reducir el tiempo del crédito, es necesario solicitar explícitamente que el abono se destine a la disminución del plazo, manteniendo el valor de la cuota. Por ejemplo, si la persona abona $7.000.000, puede lograr una reducción de hasta cinco meses del crédito con una cuota fija de $1.000.456. Esta estrategia resulta más efectiva a largo plazo y representa un ahorro sustancial.

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Reestructuración en caso de dificultad económica

En caso de pérdida de empleo u otra situación económica adversa, se recomienda contactar al banco para solicitar una reestructuración del crédito, lo que podría permitir extender el plazo y disminuir la cuota. Esta medida debe evaluarse cuidadosamente, ya que si no se cuenta con ingresos estables, es posible que la entidad financiera no acepte la compra de cartera o la renegociación del crédito.

La clave, concluyen los expertos, está en realizar abonos periódicos a capital y decidir estratégicamente si se busca reducir cuota o plazo, según las condiciones económicas personales del deudor.