Explicó que cuando a una empresa le suben los impuestos, existe el riesgo de que ese mayor costo se refleje en los precios de los productos o servicios. Mencionó posibles ajustes en impuestos como el IVA en productos específicos, entre ellos cigarrillos, tabaco y licores.

También habló de la posibilidad de un impuesto al patrimonio de las empresas, una figura que no es común en otros países. Señaló que esto implicaría que las empresas paguen no solo por lo que ganan, sino también por lo que poseen, sumándose a impuestos que ya existen como el de renta y los dividendos.

En la entrevista, Restrepo también se refirió a la inversión. Indicó que Colombia atraviesa un momento en el que la inversión, tanto nacional como extranjera, ha bajado. Explicó que cuando los impuestos se vuelven más altos y frecuentes, muchos empresarios optan por no invertir o por llevar su capital a otros países, lo que termina afectando la generación de empleo.

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La discusión legal y el papel de la Corte Constitucional

Otro punto central de la conversación fue si esta emergencia económica cumple o no con lo que exige la Constitución. Para Restrepo, la respuesta es negativa. Durante la entrevista afirmó: “Los requisitos constitucionales son simples. Tiene que ser un hecho sobreviniente y excepcional”.

El exministro explicó que los argumentos que usa el decreto, como la falta de recursos para seguridad, salud o subsidios de energía, no son situaciones nuevas. Dijo que son problemas que el país conoce desde hace varios años y que, por lo tanto, no cumplen con la condición de ser hechos imprevistos: "Entonces, ninguno de los hechos es sobreviniente ni excepcional. Son hechos que lo único que demuestran es una mala planeación fiscal. Y lo que está claro es que una declaratoria de emergencia económica no puede justificarse por una mala planeación fiscal". 

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También cuestionó que el Gobierno justifique la emergencia porque el Congreso no aprobó una ley de financiamiento. En su explicación, recordó que el presupuesto ya se había presentado con un faltante considerable y que eso era conocido desde el inicio del trámite.

"A mí me parece que por donde se le mire este decreto es inexequible, pero además dice una cosa al final, y es que tiene que adoptar la emergencia económica porque el Congreso no le aprobó la ley de financiamiento. Por Dios, si eso se sabía de antemano. El Gobierno presentó un presupuesto desfinanciado en más de 45 billones de pesos y ahora dice que el Congreso no le aprobó los recursos adicionales. Es que el Congreso no puede ser irresponsable, no puede aprobar un presupuesto que no tiene los suficientes ingresos", explicó. 

En este punto, Restrepo indicó que ahora será la Corte Constitucional la que tenga la última palabra. Explicó que el alto tribunal puede estudiar el decreto e incluso suspenderlo de manera provisional mientras toma una decisión de fondo. Advirtió que si no hay una suspensión y los impuestos empiezan a cobrarse, los ciudadanos podrían pagar tributos que después podrían ser declarados inválidos.