
En entrevista con Alerta Bogotá 104.4 FM, Federman Vargas Ocampo, de 66 años, contó que fue víctima de un atraco mientras realizaba un acarreo en Anapoima, Cundinamarca.
El adulto mayor fue contactado por un supuesto cliente que requería el servicio de transporte. Sin embargo, la solicitud resultó ser un engaño que terminó en un robo.
El vehículo hurtado corresponde a una Nissan Frontier roja de estacas, modelo 2012, que hasta ahora no ha sido recuperada.
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La familia interpuso la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General de la Nación, aunque hasta ahora no se han reportado capturas.
¿Cómo ocurrió el atraco?
El propio Vargas Ocampo narró lo sucedido en la emisora. Indicó que el jueves 11 de septiembre, hacia las 4:30 de la tarde, fue abordado en Anapoima por un joven de unos 25 a 30 años, que le solicitó un servicio de acarreo.
El hombre se mostró cordial y le aseguró que necesitaba transportar elementos a una finca cercana.
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“Llegamos al sitio de donde se sale de Apulo hacia La Vega y entonces le digo: ‘Bueno, por aquí es’. Me dice: ‘No, por acá no es’ (...) antes de llegar al puente, me dice: ‘Voltee a la izquierda’ y era un callejón sin salida porque ahí era una brecha destapada. Entonces me dice: ‘Pare aquí’. Cuando me dice: ‘Pare aquí’, me bajo de la camioneta, cierro la puerta y enseguida un señor grandote me abordó y me dijo: ‘Las llaves, agáchese y pase el teléfono’. Entonces, yo se las paso; yo no puse resistencia ni nada de eso", contó Vargas Ocampo.
De inmediato, salieron otros cuatro sujetos. Dos de ellos obligaron a Vargas a internarse en una zona montañosa mientras lo amenazaban con un arma de fuego.
"Me hicieron agachar y se fueron; dos se subieron a la camioneta y los otros dos me llevaron hacia el monte. Me llevaron al monte (...) Me amarraron, me amordazaron y me decían que no dijera nada porque me mataban, y que no fuera a poner el denuncio porque ellos tenían amigos en la Policía y amigos en la Fiscalía”, relató.
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Conductor mayor cayó en la trampa de falsos clientes
El adulto mayor permaneció cerca de tres horas amarrado y amordazado a la orilla de un río, vigilado por dos de los delincuentes.
Tras liberarse, Vargas trató de salir del lugar rodando por el terreno rocoso hasta alcanzar un camino. Caminó aproximadamente un kilómetro hasta llegar a la vía principal, pero una buseta no se detuvo al verlo en mal estado. “Anduve durante 3 horas por la vía central hasta llegar a Anapoima”, recordó. Allí consiguió un teléfono prestado y llamó a su hija en Bogotá, que coordinó con sus hermanos y la Policía para recogerlo.
Llamadas extorsivas y amenazas
Luego del robo, la familia recibió llamadas en las que desconocidos afirmaban tener la camioneta y pedían $5.000.000 millones para devolverla. Sin embargo, nunca enviaron pruebas de tener el vehículo. Incluso, la nuera de Vargas recibió amenazas para que no publicara nada en redes sociales sobre el caso.
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Denuncia ante la Fiscalía y llamado a las autoridades
La familia Vargas confirmó que ya interpuso el denuncio formal ante la Fiscalía General de la Nación. El caso está bajo investigación y el vehículo hurtado continúa reportado como robado.
El conductor también advirtió que en la zona se presentan con frecuencia otros delitos, como el sacrificio ilegal de vacas para comercializar su carne. Según la Policía, aunque están al tanto de estas situaciones, aún no han identificado plenamente a las bandas responsables.
Hasta el momento, no se han reportado capturas relacionadas con este hecho. La víctima, aunque fuera de peligro, sigue recuperándose del impacto emocional tras haber sido retenido y amenazado por los delincuentes.
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“Es tremendo porque uno trabaja honestamente haciendo acarreos y llegar a esto, pues siempre es complicadito y le duele a uno, porque es lo único que tenemos”, expresó Vargas Ocampo, que aún espera recuperar su camioneta, su herramienta de trabajo y sustento familiar.