
A administradores de conjuntos se les acabó chistecito: no podrán sancionar a residentes por Ley
Vivir en un conjunto residencial es, para muchas familias en Colombia, una opción cómoda y segura, ya que cuentan con portería, zonas comunes, servicios compartidos y reglas para que todo funcione bien.
Ese orden está respaldado por la Ley de Propiedad Horizontal, que desde el año 2001 fija cómo deben comportarse propietarios, arrendatarios, consejos y administradores.
Sin embargo, con frecuencia, se presentan roces y confusiones, especialmente cuando hay sanciones de por medio. Lo que muchos no saben es que algunas decisiones de los administradores pueden ir en contra de la ley. Conozca cuáles son los límites legales para evitar más de un dolor de cabeza y proteger sus derechos.
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La práctica común que se le acabó a los administradores
En varios conjuntos del país, los administradores envían sanciones por escrito como si fueran jueces. Esto, según explica la abogada Stephanie Rendón, es completamente ilegal.
La experta en contratación asegura que los únicos que pueden imponer sanciones son la asamblea de copropietarios o el consejo de administración, siempre que esa función esté claramente asignada en el reglamento interno.
Una sanción firmada directamente por el administrador no tiene validez legal, aunque esté bien redactada o sea entregada en forma oficial. No respetar ese proceso viola el derecho al debido proceso, un principio básico en cualquier norma.
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¿Qué hacer si llega una sanción que no cumple con la ley?
Si un residente o propietario recibe una sanción firmada solo por el administrador, puede defenderse por la vía legal. La acción de tutela es una herramienta válida cuando se ve afectado un derecho fundamental, como el debido proceso.
La Ley 675 de 2001, en su artículo 60, establece que las sanciones deben seguir un procedimiento claro y justo. Esto incluye valorar la intención del acto, si hubo imprudencia o daño, y aplicar criterios de proporcionalidad.
Además, el reglamento de cada conjunto debe definir con exactitud qué conductas son sancionables y cuáles sanciones aplican. Nada de improvisaciones ni decisiones unilaterales.
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Claves para evitar abusos y saber cuándo sí se puede sancionar
Tener claro lo que dice el reglamento de propiedad horizontal es el primer paso para evitar abusos. Este documento debe estar disponible para todos los residentes, propietarios o arrendatarios.
Si una sanción no viene respaldada por una decisión colectiva de la asamblea o el consejo, es como si la hubiera firmado un vecino cualquiera. Aunque el administrador es figura visible, no tiene poder para castigar por sí solo.
Por eso, antes de aceptar una multa o restricción, vale la pena preguntar quién la impone, con qué autoridad y bajo qué norma. La ley protege tanto a propietarios como a inquilinos, siempre que se conozcan los derechos.